Era una noche muy fría. Bernardo estaba caminando por la calle, cuando de repente ve a dos personas que salen de una casa. Pensó que esa era una buena oportundiad para entrar a esta a robar, porque al verlos salir algo le hizo pensar que no iban a volver en mucho tiempo. Además le sorprendió lo grande y hermosa que era la casa, por lo tanto pensó que iba a conseguir un gran botín, pero estuvo muy lejos de conseguir eso. Esperó detrás de unos árboles y a medida que la pareja se iba alejando, él se iba acercando sigilosamente . Cuando estuvo frente a la casa, un escalofrio se apoderó de su cuerpo; tenía la intuición que debía arrancar de allí y olvidar esa noche. Pero cuando tenía la determinación de hacer algo, nada lo hacía flaquear; ni la intuición ni la razón.
Bernardo rompe la ventana y logra entar a la casa. No podía ver nada, pero se logra guiar por una tenue luz que provenía del salón. Lo siguiente que vio lo sorprendió mucho: la casa no estaba vacía , pero tampoco estaba con gente. La luz provenía de los espíritus que abundaban en la casa. En el sofá estaba sentada una señora de edad mayor que le enseñaba a tejer a una niña. En otro sillón habia un señor que le mostraba una colección de estampillas a un niño. Al lado de una ventana había un joven que le pedía matrimonio a una mujer a la luz de la luna. Y así estaba llena la casa de espectros ,de los cuales Bernardo trata de escapar, no muy seguro de que lo que estaba viendo era real. Al dirijirse a la puerta principal , se da cuenta que esta estaba cerrada, por esto se dirige a la cocina. La cocina estaba también llena de espectros , de los cules el que más le impacto fue el ver a un niño que lloraba desconsoladamente en los barzos de su mamá. Bernardo pasa entre medio de los espíritus dirigiéndose a la ventana. Trata de abrirla , pero no lo logra, luego trata de romperla , pero vuelve a fallar. Hizo lo mismo en todas las ventanas, pero el intento fue en vano. Luego decide volver al salón y escapar por la ventana por la que había entrado. Pero ninguna de las ventanas estaba rota y de nuevo sus intentos de escapar fueron en vano. En la casa aparecían cada vez más espíritus, mientras otros iban desapareciendo. Así Bernardo se dio cuenta que estos formaban parte de los recuerdos de la casa, tomándosela por completo. Ahora su cuerpo también irradiaba una tenue luz ,pasando a formar parte de un recuerdo más de esta casa y su destino , del cual la pareja había logrado escapar, era permanecer allí por el resto de la eternidad.
miércoles, 17 de junio de 2009
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